¿Sabía Usted que muchas de las conversaciones que están teniendo lugar en este momento son en inglés y entre interlocutores no nativos? Esa será, sin duda, una de las situaciones más frecuentes en sus relaciones de negocios internacionales, y la buena noticia es que la comunicación, gracias a una más fácil comprensión, será sencilla y viable para ambas partes, en términos generales. Seguro que ya se ha dado cuenta.
Surgen también en esa circunstancia algunos problemas, la diferencia de nivel entre ambas partes, pero tanto uno como el otro pondrá todo de su parte por entenderse.
- El inglés no es un idioma sencillo.
El inglés, a diferencia de lo que muchos airean, no es un idioma sencillo. Es una lengua inagotable, con un vocabulario rico y extenso y una variedad infinita de modismos que para nuestra desgracia se usan continuamente y cuya lista va aumentando regularmente, como consecuencia del estado vital del idioma, vivo, pero que muy vivo. La otra buena noticia es que es preferible no abusar del uso de idioms, porque en muchos casos son territoriales, con lo que estarán carentes de significado para los nativos de otras regiones.
Por si esto fuera poco hay tantos “inglés” como “angloparlantes nativos”, más allá del inglés americano, australiano, canadiense, escocés, irlandés o británico. Y sí, eso ocurre en todas las lenguas, pero en esta ocurre mucho, mucho.
- Hay problemas, pero también soluciones.
De lo que se trata en definitiva es de que nos entendamos, y esto se consigue con enunciados simples y pronunciación clara y cuidada. Supone un esfuerzo, y un esfuerzo exigible a ambas partes, sí, también a la nativa, que tiene tanto interés como Usted en que se le entienda bien.
Si es cuestión de dificultad en la escucha, no hay nada de malo en interrumpir en el momento preciso y decir “Would you mind repeating that please?”
Ahora, si escuchó lo que alguien dijo pero no sabe su significado, hay que asegurarse de que se percate de esa situación, dado que si usamos la expresión anterior, puede que su interlocutor repita textualmente lo que ha dicho, con lo que si no lo ha entendido la primera vez, es probable que tras esta segunda se quede como estaba.
Evite, sin embargo, decir “I don’t understand.” Es demasiado directo y rudo. Mejor: “I’m not sure I follow you.”
También puede elegir la expresión que no ha entendido y pedir que la explique con otras palabras “Could you explain what you mean by ………(palabra o expresión no comprendida)?” o “What exactly do you mean by ……..?”
En el caso de que crea haber entendido pero no esté seguro, la opción es parafrasear lo que se ha dicho o expresar con sus palabras lo que ha interpretado y solicitar confirmación.
También puede obtener claridad en lo que se ha dicho repitiendo la idea clave con la entonación de la pregunta. Así que si alguien dice «Considering the results, prices need to be increased”, podría decir » prices need to be increased?» De esta manera, está invitando a más detalles o ejemplos.
Ojo: algunas de las preguntas que usamos para aclarar también pueden usarse para poner en duda las ideas u opiniones de alguien. Actuamos sorprendidos y pedimos confirmación para mostrar que no estamos de acuerdo o no creemos lo que alguien ha dicho. Para evitar esto es imprescindible añadir al principio mejor que al final de la solicitud de aclaración estas frases “just to clarify” o “just so I understand here” que evitarán susceptibilidades.
- Otras recomendaciones para una buena comunicación y un mejor entendimiento.
- Evite los acrónimos, no todo el mundo conoce el significado de TBH, TBA o FYI. (¿Se atreve a desvelarlo?).
- Si se está comunicando con un no nativo, elija palabras sencillas para decir lo mismo. Mejor “make” que “produce”, “continue” que “ proceed to” y “think about” que “consider”. De nada sirve lucirse si su audiencia no le entiende.
- Reduzca la velocidad y hable un poco más alto. Cuando estamos incómodos o nerviosos, tendemos a acelerar y a hablar más bajo lo que puede afectar negativamente a nuestra pronunciación.
- Evite jergas y modismos. No ponga obstáculos a la comprensión.